sábado, 30 de marzo de 2013

Sólo metamorfosis


 
 
 
 
 

 
 
 
 
 
 
¿Cuántas novedades surgirán en la vida,
seguidoras de capullos y preludios?
¿Se tornarán en difuntos desenlaces
por resultados de remates ya caducos? 
.
Que los esbozos delineados por la vida,
se personen en mudas de permanentes sugerencias,
testigos de la fugacidad de la naturaleza
cuyo entender nos alimenta y acompaña. 
.
Suspiro para que sus presencias sean todo
y sólo metamorfosis que el transcurrir requiere
en crecimiento hacia cada universo unido
a su tránsito hasta la conclusión final.
 .
 .
 .
 
 
 
 

sábado, 23 de marzo de 2013

Amándote


 
 
 
 
 
Hoy sufres y desesperas
mientras escupes la palabra angustia.
Tu mente, un seso de divagaciones
como una surcada nuez, sujeta y mustia. 
.
Sabedor de que tu dueña libertad
te convoca a tomar colgantes senderos…
¿Será el elegido, acertado?
¿Hallarás en la esquina el correcto? 
.
Dudas, mas conoces la obligación
de acotar con vallas tus dominios
y plantar en tus límites, mamparas
donde situar cada paso del camino. 
.
Te agarraré cuando quieras de la mano
mientras sujeto las lianas del puente,
tomando la maza para ahondar en la tierra,
bordes decisivos y barandillas de suertes. 
.
Las ganas de completar el lindero
se aúpan en sintonía con los mejores diestros.
Amándote, junto a la frontera viviremos
el escogido terreno y los deseos nuestros.
 .
 .
 
 

sábado, 16 de marzo de 2013

Escribiendo


 


 
 
Si tuviera más tiempo, escribiría hasta saciarme, sintiendo escupir hasta la última de las sensaciones que me embargan. Arrastraría la mano sobre el blanco papel destripando los más íntimos suspiros.
Porque escribir es algo más que colocar palabras una tras otra. Más que llenar tiempos y calmar momentos difíciles con la expulsión de los sentimientos. Es mucho más que ofrecer información y pobre del que sólo la busque.
Aprender a encontrar la esencia de uno mismo y subyugarse hasta hallar una forma exquisita de expresar los caminos personales, conlleva a examinar cada instante desde todas las perspectivas posibles.
Escribir después de hallada esa esencia, traslada las vivencias a un punto de unión de entramados lazos entre palabras, donde cada frase es en sí misma un mundo de deleite agarrado al encuentro de plasmar en el papel, un temblor, una risa o el encuentro o desencuentro entre dos almas.
Desentrañando las consecuencias que los sentidos aportan a lo interno, al subsuelo de la existencia. Exprimiendo con las fauces de lo íntimo, el dulzor o la amargura del árbol frutal, de la savia del yo.






 

domingo, 10 de marzo de 2013

Cada año








Hace tiempo tomé la decisión de no volver a escribir sobre ciertos momentos vividos en el pasado que, aunque responsable de parte de mi presente, no podían sentirse protagonista en el día a día.

Así con el pasar de los años, han encontrado un pequeño lugar donde sentarse y dormitar. Me percaté de que si seguía persiguiéndolos y escribiendo sobre ellos no terminarían y seguirían flotando en el aire y podían llegar a tornarse espesos y recalcitrantes.

Los privé de vida y pintándolos de desesperanza para no pensar en ellos. Con esta decisión y la compañía de mi libertad al lado, apenas me afectan en el hoy, pero con el camino, siento que me han ido quedando algunas ilusiones por el camino, con el transcurrir de la rutina. Pero es el sendero que tomé, consciente como soy y no me permito hablar sobre ello.

Quizá coarto más de lo que debiera, porque el “aprender a estar” no es siempre beneficioso. Lo bueno es que el hecho de engañarme se alejó hace tiempo. Es mejor sentirse con la realidad de frente.

Lo malo son estos primeros días de primavera, en los que por todo y por nada, tengo ganas de llorar, como todos los años…
 
 
 
 
 

sábado, 2 de marzo de 2013

Eje del mundo


 
 
 
 
 
 
Nos acompañan en cada paso del camino. Ellos, impertérritos al paso de los siglos, excepto si un mal rayo los parte o nuestra mano los hiere.

Comienzan a engalanarse como si fueran a una fiesta. Los ciruelos asoman diminutas caricias rosadas entre sus ramas mientras los árboles liquidámbar regalan a la tierra sus secos madroños a cientos. Las prímulas ya llevan semanas pintando húmedos rincones con pálidos amarillos mientras otros tonos más intensos dibujan los cuerpos de las mimosas.

Las margaritas, junto a sus raíces los acompañan en un frenético baile de apariciones fugaces,  vivas estrellas y los gorriones, simpáticos saltarines, se pasean, hoy aquí, mañana en otra esquina saciados con la que les viene.

El invierno está siendo riguroso en su pasar, llevándose la tierra a veces, nutriéndola otras pero siendo necesario para el descansar. Las ramas, dormidas, han dejado vislumbrar el cielo plagado de nubes, en un vaivén de movimientos y tempestades. El muérdago, protagonista chupóptero de savias vecinas, volverá a ocultarse entre el fragor de las nuevas hojas que comienzan a brotar.

La primavera se asoma mientras la oscuridad se oculta. Vuelve la luz al día y los árboles a vibrar. Eje del mundo, árbol de la vida.